Cadáver calcinado del joven acaponetense David Sánchez Osuna, hallado en el municipio de Tuxpan, cerca de la comunidad de Coamiles. (Foto tomada de Nayarit en línea)
Los asustados vecinos de Palmillas, Sin. cubrieron las cabezas con una sábana para evitarles tan tétrico espectáculo a los niños que ya se disponían a ir a sus escuelas. (Foto tomada del Noroeste.com)
Sobre la banqueta y frente a una escuela, estaban las cabezas de tres desafortunados acaponetenses.___________________________________
ESTA ES UNA BREVE RESEÑA DE LO QUE COMENTARON LOS MEDIOS MÁS IMPORTANTES DE LA REGIÓN CON LA TERRIBLE OLA DE VIOLENCIA QUE AZOTÓ A NUESTRO OTRORA PACÍFICO PUEBLO ACAPONETENSE. EL SALDO HASTA AHORA CINCO MUERTOS.
En la noche del martes tres hombres fueron "levantados" en diferentes puntos de Acaponeta, por individuos de los cuales no se señalan identidades, ni existen pistas, pues las autoridades han mostrado total hermétismo al respecto. De lo poco que se sabe es que en la medianoche del pasado lunes, se escucharon fuertes detonaciones en la zona conocida como la "curva de las cañas", tramo de la carretera que comunica Acaponeta con Tecuala, a escasos metros de la "Internacional No. 15". En ese punto fue encontrado el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino, al cual le calculan una edad entre los 25 y 30 años, con las señas de piel morena, cabello se color negro y con un corte militar, bigote y complexión regular, mismo que presentaba cinco impactos de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo, al parecer de armas conocidas como "cuernos de chivo", las cuales se encontraron 39 casquillos percutidos y cinco del armamento conocido como AR15. El cuerpo de este desafortunado individuo se hallaba boca abajo sobre el asiento trasero de un automóvil marca Nissan, tipo Tsuru, color gris, modelo 2005, con placas de circulación JDX-17-84 del estado de Jalisco.
Horas más tarde en la sindicatura de Palmillas, del municipio vecino de Escuinapa, sobre una banqueta colindante con una escuela, los asombrados pobladores del pacífico lugar, hallaron tres cabezas de personas "levantadas" horas antes en Acaponeta. Fue tal la sorpresa de todos, que decenas de chiquillos que se disponían asistir a sus clases, contemplaron desconcertados y con horror, la tétrica y espantosa imagen de las cabezas nadando en su sangre, hasta que algún vecino las cubrió con una manta para evitar el macabro espectáculo.
Los primeros informes de la policía del vecino Estado de Sinaloa, precisaron que dos de las cabezas correspondían a personas de edad madura y la tercera a un joven, el cual fue posteriormente identificado como Hamurabi Mayorquín Ríos, un taxista de la ciudad de Acaponeta e hijo de conocidos ciudadanos de la cabecera municipal. Junto al espantoso hallazgo estaba un narcomensaje que textualmente mencionaba "Esto les pasa a los traidores".
Hasta el momento de escribir estas líneas, jueves al mediodía, no han sido localizados los cuerpos, ni la identidad de los otros dos sacrificados.
Al día siguiente, en el predio denominado “Los Saucillos” ubicado en los límites de los ejidos de Tuxpan y Coamiles, se halló calcinado el cuerpo de otro acaponetense, se trató de David Sánchez Osuna, de 23 años de edad, originario y vecino de Acaponeta, conocido trabajador del centro de la ciudad, al cual acribillaron con dos tiros en la cabeza, hallándose junto a su quemado cadáver dos casquillos percutidos calibre .380 y uno calibre .9 milímetros. Asimismo una cartulina con un mensaje que rezaba lo siguiente: “esto es lo que le va a pasar a todo aquel que siga al pinche bigotes, queremos un estado de paz, ya basta de secuestros, muertes y levantones: Atte. El Chaparrito”.
Todos estos hechos han producido un molesto clima de incertidumbre, confusión y miedo en una ciudadanía que no tenía roce con este tipo de actividad criminal y que la sentía lejos de su tierra. También a todas horas del día surge un nuevo rumor e historias de terror y muerte, lo que habla del estado mental afectado de la sociedad acaponetense y del norte de Nayarit y sur de Sinaloa.
En la noche del martes tres hombres fueron "levantados" en diferentes puntos de Acaponeta, por individuos de los cuales no se señalan identidades, ni existen pistas, pues las autoridades han mostrado total hermétismo al respecto. De lo poco que se sabe es que en la medianoche del pasado lunes, se escucharon fuertes detonaciones en la zona conocida como la "curva de las cañas", tramo de la carretera que comunica Acaponeta con Tecuala, a escasos metros de la "Internacional No. 15". En ese punto fue encontrado el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino, al cual le calculan una edad entre los 25 y 30 años, con las señas de piel morena, cabello se color negro y con un corte militar, bigote y complexión regular, mismo que presentaba cinco impactos de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo, al parecer de armas conocidas como "cuernos de chivo", las cuales se encontraron 39 casquillos percutidos y cinco del armamento conocido como AR15. El cuerpo de este desafortunado individuo se hallaba boca abajo sobre el asiento trasero de un automóvil marca Nissan, tipo Tsuru, color gris, modelo 2005, con placas de circulación JDX-17-84 del estado de Jalisco.
Horas más tarde en la sindicatura de Palmillas, del municipio vecino de Escuinapa, sobre una banqueta colindante con una escuela, los asombrados pobladores del pacífico lugar, hallaron tres cabezas de personas "levantadas" horas antes en Acaponeta. Fue tal la sorpresa de todos, que decenas de chiquillos que se disponían asistir a sus clases, contemplaron desconcertados y con horror, la tétrica y espantosa imagen de las cabezas nadando en su sangre, hasta que algún vecino las cubrió con una manta para evitar el macabro espectáculo.
Los primeros informes de la policía del vecino Estado de Sinaloa, precisaron que dos de las cabezas correspondían a personas de edad madura y la tercera a un joven, el cual fue posteriormente identificado como Hamurabi Mayorquín Ríos, un taxista de la ciudad de Acaponeta e hijo de conocidos ciudadanos de la cabecera municipal. Junto al espantoso hallazgo estaba un narcomensaje que textualmente mencionaba "Esto les pasa a los traidores".
Hasta el momento de escribir estas líneas, jueves al mediodía, no han sido localizados los cuerpos, ni la identidad de los otros dos sacrificados.
Al día siguiente, en el predio denominado “Los Saucillos” ubicado en los límites de los ejidos de Tuxpan y Coamiles, se halló calcinado el cuerpo de otro acaponetense, se trató de David Sánchez Osuna, de 23 años de edad, originario y vecino de Acaponeta, conocido trabajador del centro de la ciudad, al cual acribillaron con dos tiros en la cabeza, hallándose junto a su quemado cadáver dos casquillos percutidos calibre .380 y uno calibre .9 milímetros. Asimismo una cartulina con un mensaje que rezaba lo siguiente: “esto es lo que le va a pasar a todo aquel que siga al pinche bigotes, queremos un estado de paz, ya basta de secuestros, muertes y levantones: Atte. El Chaparrito”.
Todos estos hechos han producido un molesto clima de incertidumbre, confusión y miedo en una ciudadanía que no tenía roce con este tipo de actividad criminal y que la sentía lejos de su tierra. También a todas horas del día surge un nuevo rumor e historias de terror y muerte, lo que habla del estado mental afectado de la sociedad acaponetense y del norte de Nayarit y sur de Sinaloa.
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