Por: Juan Manuel Estarrón
Todo comenzó con la inoportuna y ya famosa frase “Nuestra policía, por alguna extraña razón, llega 20 minutos después de algún hecho violento” pronunciada por nuestro controvertido Gobernador ante nada menos que 31 pares de igual número de estados, frente al Presidente de la República, los titulares de las fuerzas armadas, PFP, Seguridad Pública Federal, PGR, un gabinete inservible y los coros de plañideras.
Pero al momento de estar formateando este primer párrafo (martes 22:59) recibimos otra narconoticia de 5 ejecutados y una mujer herida por esas peligrosas avenidas de Tepic para confirmarse –otra vez- que existe un gran vacío de poderes y que no hace ninguna diferencia que el Virrey esté encerrado a piedra y lodo o siga disfrutando la vida con todo el presupuesto y su “piedra de amolar” siempre colgada; es enteramente igual: el estado tiene un nuevo gobierno armado y da la impresión que Ney y sus aduladores son empleados de la “maña”.
Por eso la petición de renuncia del Virrey por los comités estatales del PAN y PRD ante este vacío de poderes –incluido el obeso Judicial donde sobran 10 magistrados quienes también deben renunciar- no solamente se justifica por violación flagrante a la Constitución Política de Nayarit de no garantizar la seguridad de sus gobernados, también por su incapacidad manifiesta para administrar el presupuesto y su distribución equitativa que contribuya al desarrollo de todas las regiones y comunidades sin la exclusiva aplicación para desarrollar un determinado polo de desarrollo.
Somos testigos de un gobierno desarticulado que pareciera estar acéfalo y se mueve por esa misma inercia que impone la corrupción e impunidad; un gobierno que siempre ha llegado tarde –cuando le da su gana- al reclamo de algún servicio a veces tan simple pero significativo para miles de usuarios, como sería el transporte público que ya es una porquería, indigno para una ciudad capital y de los más caros del país.
Decir que por “una extraña razón” han llegado tarde sus polizontes es una soberana ridiculez llevada al extremo para sensibilizar al gobierno federal sobre los supuestos envíos de más tropas, pero al mismo tiempo su contradictoria tesis del combate al narco “con fuego en el alma”; es que el abogado que tenemos como gobernante ya no sabe de qué lado está, si con dios o con el diablo.
Sus posturas ambivalentes empiezan por acarrearle conflictos de intereses personales y públicos de todos calibres; porque un verdadero hombre de estado evitaría comportarse como si perteneciera a una monarquía autocrática y absoluta compartiendo el poder con su pareja real: “El Gobernador Ney y su esposa…” frase repetida diariamente como si elegimos a dos gobernantes.
Aunque eso sería lo de menos si consideramos que el 90 % de los mandatarios son víctimas de esa tentación; sin embargo en el caso presente se conjuga con otro familiar muy cercano por el que nuestro Virrey está apostando hasta la camisa por verlo sentado en la silla que le quedó grande de origen y por lo mismo la oposición –que también llegó tarde- está pidiendo su cabeza.
Desde luego serán pedradas a la Luna por el PAN y PRD, así mismo de las organizaciones sociales que se atrevan a marchar exigiendo lo mismo; también los facebucsistas y twiteros tendrán el gusto del desahogo virtual porque Ney González jamás nos dará el gusto de una renuncia porque está detrás de una muralla llamada Beatriz Paredes y antes de perder un gobernador priista “La Dama de Hierro” preferirá que pasen sobre su cadáver.
De eso no hay ninguna duda, pero a la tlaxcalteca se le presenta la oportunidad de rechazarle al Virrey la candidatura de su cuñado por escasa popularidad que únicamente garantiza la derrota priista; no obstante sigue el insistente golpeteo del senador Raúl Mejía González contra Calderón responsabilizándolo del fracaso de su guerra contra el crimen organizado y deslindando totalmente a los gobiernos estatales.
En sus últimas declaraciones, el senador por Nayarit recordó que “El PRI ha sido el único partido que ha apoyado incondicionalmente al presidente de México en materia de reformas legales para el combate a la delincuencia, sin embargo, es hora que no da resultados por lo que la incapacidad es obvia que está en Los Pinos y no en el legislativo o en los ESTADOS”.
Esta defensa a ultranza del desgobierno neycista, ante los nayaritas se entiende nada más como un cumplido interesado porque la percepción generalizada es que el gobernador tiró el arpa desde hace mucho encasquetándosela a los ciudadanos que no hacemos nuestra tarea, pero él sí.
Al Presidente de Tepic se la endilgó (el arpa) “porque nunca das la cara” pero él sí y finalmente se la colgó (el arpa) a los mal pagados policías por su retardo de 20 minutos, pero él sí llega 20 minutos antes a las refriegas de narcos como cumplido servidor nuestro.
Jamás nos imaginamos que llegaría un día en que el Virrey se viera en un laberinto del que quizá no salga tan limpio y regularmente librado porque terminará llevando en su conciencia parte de esas 35 mil víctimas –calculadas para el 2011- en esta guerra absurda de la que es copartícipe aunque se refriegue con estropajo y jabón no le ajustará todo “el fuego en el alma” para devolvernos aquel Nayarit del que disfrutamos antes de su asalto al poder.
Por lo pronto sumemos 5 víctimas en una sola noche, en medio de la conseja popular ¡QUE RENUNCIE NEY!
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