Es una pena que mientras unos se preocupan por construir, otros están atentos por echar abajo lo que a todos beneficia. En el malecón del río Acaponeta, finalmente la autoridad municipal colocó los arbotantes que hacían falta y los puso a funcionar con la luz eléctrica que tanta falta hacía en este espacio que ya es muy visitado y frecuentado por los ciudadanos que quieren tomar el fresco o simplemente hacer ejercicio. Desde el mismo día que se montaron, los vándalos de la zona se dieron a la tarea de quebrar las esferas que coronan los arbotantes, siendo así que ya rompieron cinco y la cuenta continúa.
También es muy notable que a diario amanecen infinidad de botellas de cerveza quebradas durante las noches en que toman este espacio como gigantesca cantina. No estaría de más que la policía municipal se diera de vez en cuendo una vueltecita para desanimar a los que han tomado por asalto el bordo.
1 comentario:
Hola Ricardo.
Disculpa, pero yo supe que las lamparas del bordo salieron con algún defecto, y que estallaban solas. Para no aumentar el indice de vandalismo, ¿no? Mejor investigalo.
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