Muchas veces lo hemos comentado, el crucero de Acaponeta, regularmente es un caos: es parada de autobuses urbanos y foráneos, sin que realmente se haya construido en el lugar un paradero que haga saber a los miles que por ahí cruzan que el de ahí, Acaponeta, es un pueblo ordenado y culto. Lo de Atenas Nayarita se lleva en la cabeza, no en un espurio título que por decreto presidencial nos recetó Adolfo López Mateos; el crucero es el paso a pie de cientos de ciudadanos que cruzan la peligrosa carretera a la buena de Dios, pues no había nada que les diera protección, ningún puente o algo que se le parezca. No han faltado muertos. Otro problema son los trailers y camiones torton que acostumbran estacionarse a la orilla de la carretera, justo a la salida de la gasolinera de Sierra Hermanos y que impiden a los conductores de vehículos que vienen de cargar combustible, tomar con seguridad la carretera. Puestos de alimentos y vendimias, sitios de taxis, decenas de automotores yendo y viniendo, han convertido al lugar en un sitio de riesgo.Ahora con agrado vemos que gracias a las gestiones que la Técnico en Urgencias Médicas Irene Plantillas Rodríguez, actual directora de Protección Civil Municipal, hizo ante el Director General de la S.C.T. Ing. Federico Eduardo Díaz Ávalos, se colocaron reductores de velocidad sobre la cinta asfáltica de la internacional No. 15, así como líneas de pintura que indican hacia dónde deben circular los carros, además de un tope en la curva sobre el boulevard, frente al taller de los Herrera, punto donde se han suscitado varios accidentes por la velocidad con llegana este punto los coches y camiones.
Es un buen comienzo para dar forma y seguridad al famoso crucero de Acaponeta, principalmente en el área donde paran los camiones: un paradero en la parte oriente de la carretera y otro en la poniente para los autobuses que circulan de sur a norte. Buena labor.
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