BREVE SOBRE LA MONOGRAFÍA DE ACAPONETA

¿Cuál será el destino de un pueblo que no se conoce a sí mismo? Simplemente no tendrá rumbo y pocos serán los proyectos que puedan implementarse para progresar. Si no nos interiorizamos con nosotros mismos, estamos condenados a repetir los mismos errores y no tendremos la oportunidad de alcanzar el éxito en las distintas acciones que emprendamos. Por ello, como propósito primordial, los habitantes de una comunidad o de una sociedad como esta tan querida de Acaponeta, es tener el conocimiento exacto de lo que uno quiere, y un deseo ardiente de poseerlo.
Los jóvenes estudiantes de Acaponeta, siempre andan tras las respuestas a las preguntas que sus profesores les hacen sobre la ciudad de las gardenias y sus alrededores: qué significa el nombre de Acaponeta, por qué su escudo de armas lleva tales o cuales elementos, quién puede hablar sobre el medio físico del municipio, sus sitios de interés turístico y cultural. Muchas veces llegan los alumnos preguntando sobre las historias de la construcción de edificios como la presidencia municipal, la casa de la cultura, la misma plaza principal “Miguel Hidalgo”, su kiosco, etc. Requieren datos sobre la administración municipal o el número y nombres de alcaldes que han tenido este lugar. ¿Cuántas comunidades hay alrededor de la cabecera municipal y quiénes han sido personajes principales en su historia?
La monografía de un pueblo se hacía entonces necesaria y no debe ser esta una simple fotografía de su entorno, sino más bien una película que nos muestre la trayectoria y trascendencia de los sueños y anhelos de los ciudadanos de una comunidad que enfrenta el reto de la modernidad y la globalización. No teníamos una monografía como tal y buena falta nos hacía.
Néstor Chávez Gradilla, historiador de la región norte de Nayarit y hoy oficialmente el cronista municipal, hizo suya la máxima que dice que una meta es un sueño con fecha de entrega, y esa fecha y esa ilusión de escribir para su lugar de nacimiento, una completa monografía se cumplió el lunes pasado por la noche, ya que ofreció al pueblo su “Monografía de Acaponeta”, que fue publicada con el apoyo del Ayuntamiento de Saulo Lora, el Consejo de Desarrollo Cultural Municipal, el CECAN, el Conaculta y de algunos particulares, para ofrecer a la ciudadanía un texto donde consultar todo aquello que nos haga adentrarnos en nosotros mismos y fijar la ruta a seguir de cara al progreso y en el marco de una mundialización a veces mal entendida.
Menuda tarea se echado Néstor a cuestas, pues una monografía nunca termina de escribirse, es como la materia y la energía que no se destruyen, solo se transforman. Por supuesto hay que recomendar el libro del amigo Néstor Chávez Gradilla, mismo que finalmente todos construimos con nuestras acciones, trabajo, actos heroicos y el amor que decimos tener por Acaponeta, la Villa de las Gardenias, la ciudad de los pianos o la Atenas de Nayarit. Con este documento los estudiantes podrán decir que Acaponeta es el lugar junto al río donde el frijol se enreda en carrizo de caña; que hemos tenido 63 presidentes municipales desde Don Miguel Romero en 1917 hasta el Dr. Saulo Lora en el 2009; que la pila de los Monos, es un importante sitio arqueológico en el área del vecino Huajicori y que el edificio de la Presidencia Municipal, está, por cumplir 100 años, como la Revolución Mexicana. Estoy cierto que desde el lunes, el libro del cronista municipal, está en vías de agotarse. Enhorabuena. (PEPE MORALES)